El científico Karl Rother descubre que su esposa, además de serle infiel, le está pasando información sobre sus descubrimientos a los aliados. Rothe la asesina y las fuerzas de seguridad del gobierno, en lugar de castigarlo por ello, ocultan lo sucedido para que el científico prosiga con unas investigaciones muy útiles para ellos. Pero, tras el crimen, Rothe comienza a sentir un ansia insana de asesinar, de la que sentirá tal culpabilidad que le irá consumiendo poco a poco.